Novedad Editorial. Unida a mi destino, de Dolores Domínguez

De nuevo, tenemos entre nuestras novedades la visita de Dolores Domínguez con su última novela Unida a mi destino, la tercera parte de la saga Hijos de Nuada. Una novela romántica cargada de fantasía y emociones. 

En Tiempo de Lectura nos hicimos eco del inicio de esta historia con las novelas: Condenado a amarte y La maldición de Danu, obras que nos cautivaron desde sus primeras páginas. 

Si eres un apasionado de este género o si nunca has leído nada sobre él, no pierdas la ocasión de empezar con Hijos de Nuada.

En su sinopsis ya nos deja claro que encontraremos en la novela:

Darius Blackstone ha perdido su reliquia sagrada, la piedra de Fail está ahora en poder de la mujer que la maldición ha unido a su destino. Elisabeth O'Rourke ha nacido bajo una profecía que impide que la toquen, lo que ha hecho de su vida un tormento, y encima, ahora, aparece esa piedra en sus dominios.
¿Conseguirá Darius conquistar a Elisabeth y recuperar su piedra o ganará Nuada la batalla?

Y para muestras un botón. Nada mejor que un pequeño fragmento para crear  interés:

"No se acercó, tan solo extendió su mano y el cuerpo del hombre acudió a él. Los largos dedos se cerraron sobre su cráneo hasta casi crujir los huesos. Una mueca de dolor desfiguró su rostro mientras que su atacante se regocijaba en ello. No pudo gritar, ni siquiera eso le permitió, no le gustaba las quejas ni los lamentos. Apenas podía creerlo cuando su cuerpo fue lanzado hacia una esquina de la estancia cual desecho. Su mente sonrió, sus labios no pudieron hacerlo a causa del dolor. Vivía, eso era suficiente, pensó mientras le veía caminar enfurecido, alejándose de él. Sabía que otro cargaría con su enfado y eso lo alegró todavía más.

     La puerta se abrió antes de que entrara, la fuerza de su rabia la impulsó para dejarle paso.

    —¿Qué habéis hecho? —vociferó—. ¿Cómo la habéis perdido?

    —No…no la hemos perdido. Más bien… se ha… ido.

   Golpeó con toda la ira contenida el bastón contra el suelo. ¿Cómo podía moverse esa inmensa piedra? Le costó casi medio siglo encontrar una de las reliquias sagradas y ahora la habían perdido. Los objetos a su alrededor salieron disparados. ¡No tenía otro medio siglo! Samhain estaba cerca, su tiempo se acababa. ¡Necesitaba esa maldita piedra!

    Estaba mitad a mitad, había perdido dos de los objetos de Danu, no podía perder los otros dos. ¡No! Sus posibilidades disminuían con cada paso de la maldición y ya había sentido el contacto de su tercer hijo. La diosa jugaba rápido y eso hacía que tuviera poco tiempo. Esta fiesta de Samhain era su mejor momento, las barreras entre los dos mundos estarían débiles y él podría actuar.

     ¡Maldita sea! Tan solo tenían que llevar las reliquias a la colina, ni eso pudieron obedecer. Ellos estaban allí para seguir sus órdenes. No existirían si no fuera por él. Habían sido creados para eso. ¡Malditos mortales! 

   —Señor, pienso que… —se arrepintió en el mismo momento en que empezó a hablar. Era una especulación absurda, y sin embargo estaba casi seguro de ello. 

     —¡Habla! 

   —Creo… que la piedra… sabe… que la hemos encontrado… y se ha ido —ahora parecía más inverosímil. 

   —¿Acaso crees que tiene inteligencia o consciencia? —Le gritó mientras lo elevaba del suelo sujeto por el cuello—. ¡Es una maldita piedra! 

   Y lo arrojó como había hecho con su antecesor portador de malas noticias. Los mataría, pero desgraciadamente, los necesitaba a ambos. 

   Su sangre hervía literalmente de furia, como había podido ser más fuerte un simple sentimiento mortal que el poder de su inmortalidad. Le estaba ganando la batalla algo que volvía débiles a quien lo sentía. Todo a su alrededor salió despedido, impulsado por el mal que aquella figura emanaba". 

En el siguiente enlace encontrarás la reseña de la primera novela que escribió Domínguez antes de la saga, titulada Ella es mía.